30 marzo 2012

28 marzo 2012

Para que los objetos cobren vida

A todos nos gustan las animaciones de Stop-Motion, esas películas grabadas cuadro a cuadro que hacen que los objetos inanimados cobren vida y se transformen en los protagonistas de las más variadas aventuras.

El Stop Motion, a pesar de ser un trabajo arduo, es especialmente bueno para  comenzar a probar tus dotes de guionista y director, ya que no tienes que pagarle a actores ni conseguir grandes escenografías, simplemente te puedes encerrar en tu cuarto durante 6 meses y luego salir solo para recibir la palma de Oro del festival de Cannes.



Ahora, esto es mucho más sencillo con la herramienta de código abierto, gratuita y multilenguaje "qStopMotion" que te permite grabar con tu webcam con algunas facilidades:

  • Capturas la imagen de forma muy simple: presionando la tecla espaciadora.
  • Te muestra las últimas dos imágenes superpuestas con lo que estas haciendo en este momento, lo que te permite visualizar fácilmente el movimiento y por lo tanto poner los objetos en la posición correcta.


Es muy sencillo, no cuesta nada descargarlo, instalarlo y ocuparlo. ¡Prueba! ¿Quién sabe que talentos ocultos tienes tu y esos trocitos de papel que están en tu escritorio?

Disponible para Windows y Linux.

Enlace: QStopMotion



26 marzo 2012

¡Quema calorías y genera electricidad!

No es una idea novedosa: Generar electricidad con una bicicleta. ¿Por qué lo publico? Porque los chicos y chicas de Prende UC han hecho el trabajo completo: Un completísimo y explicativo manual de como hacer tu propia BiciWatts, con materiales completamente accesibles y generando una buena cantidad de electricidad.

Como ejemplo: Pedaleando 30 minutos al día podrías generar electricidad suficiente para alimentar toda la iluminación de tu casa. (¡7 ampolletas de ahorro funcionando durante 7 horas al día!).

En este manual te explican paso a paso, con todo detalle, cómo armar tu BiciWatts e incluso te dicen Cuantas calorías quemarás!. ¡No gastes más plata en el gimnasio!. Ilumina tu hogar y tomemos acciones concretas para evitar centrales como la de Castilla e Hidroaysén*.



Enlace: Biciwatts

*Sé muy  bien que estas centrales están destinadas a alimentar el sector minero e industrial, pero bueno... algo hay que hacer para cambiar el modelo, y es bueno partir por casa y descubrir que la electricidad no es algo mágico que se genera al otro lado del país, sino que es algo mágico que podemos generar en nuestra casa.

24 marzo 2012

Película: The Artist (2011)





Título: The Artist (El Artísta)
Director: Michel Hazanavicius
Año: 2011
Premios: Oscar a Mejor Película y otros 4 Oscar, otros 102 premios y ya se encuentra en el lugar Nº125 de las Top 250 películas de la historia de IMDB.
Más Información >>>

Con solo ver la lista de premios pareciera que la película fuera lo mejor del mundo. No es así -a mi gusto- pero es una buena película.

Hay que considerar que el film es completamente en Blanco y Negro y es una película muda, acompañada por música orquestada al más puro estilo del cine mudo, que es dónde se ambienta la trama.

Tomando en cuenta estas limitaciones auto impuestas por el director, efectivamente la obra es una maravilla, ya que logra mantener la atención y expresar un drama como nunca se hizo en el cine mudo.

A pesar de tener que recurrir a la sobre-actuación de gestos, movimientos y miradas, la obra logra expresar todos los elementos que se esperan de una película moderna, sin la necesidad de recurrir a los clásicos cuadros de texto del cine mudo (de que los hay, los hay, pero es increíble como prescinde de ellos en la mayoría de los "dialogos").

La fotografía está muy bien cuidada, las actuaciones impecables, y la banda sonora, que toma un rol protagónico en una pieza como esta, está muy bien seleccionada, de manera que mantiene el ambiente de la época, logrando ademas exaltar los momentos perfectamente.

Como decía, no creo que sea la mejor película del año ni mucho menos, pero merece ser vista.

22 marzo 2012

Ha salido un nuevo estilo de baile...

Pocas veces uno encuentra una tan buena combinación de tecnología con creatividad humana, o sea, ciencia al servicio del arte, y el arte al servicio de los sentidos.

Solo un video, pero que invito a ver a alta calidad, a pantalla completa, que aunque no les guste el estilo musical, nadie puede negar la genialidad y bien logrado del producto.





Tomado de: FayerWayer


18 marzo 2012

Paradigmas

 

"Trascender paradigmas es ir más allá de las suposiciones iniciales. Es entrar en el espacio en donde los valores, modelos mentales y prioridades cambian" 
-- Donatella Meadows.


Fotografía de:  MrOmega

16 marzo 2012

Lo mejor de Marzo del 2011

Como siempre, una selección de lo mejor de lo publicado hace un año aquí:

1 - Humor



2 - Frases, poemas e historias



3 - Otros



Años Anteriores:

15 marzo 2012

Me gusta: 1Q84



Me gusta leer, aunque aquí creo que no he comentado ningún libro.

Este vez especialmente quiero decir que me gusta el libro 1q84 de Haruki Murakami.

A pesar de que el autor se hizo conocido con Tokio Blues en el 2005 (en su versión en español), yo no lo conocí hasta un par de años después con la maravillosa "crónica del pájaro que da cuerda al mundo" donde el autor me comenzó a sumergir en sus extraños mundos.

En japones, la letra Q y el número 9 son casi idénticos, por lo que en esta novela nos introduce a un mundo paralelo al año 1984, donde en vez del "gran hermano" propuesto por Orwell, Murakami nos trae a la "little people", donde un par de personajes nos llevaran a los más extraños recovecos mentales del autor, que logra configurar -a mi gusto personal- una historia puzzle muy bien lograda.

A Murakami lo amas o lo odias tras leer unas pocas páginas, así que pueden salir pronto de la duda.

La novela tiene 3 partes, las cuales ya se encuentran publicadas en español, por lo que no tendrán que esperar (como yo) para vivir el desenlace.

12 marzo 2012

Enredarse



Hace tiempo que no comento un juego por aquí. Generalmente les recomiendo juegos altamente adictivos, sin embargo Entanglement no es así. Es un juego entretenido pero calmado, donde el objetivo es lograr que nuestro recorrido (linea roja) pase por el mayor número de piezas antes de estrellarnos contra un muro.

El juego está completamente desarrollado en HTML5, por lo que no requiere flash y por lo tanto se puede ejecutar desde cualquier dispositivo móvil que tenga un buen navegador.

Es para jugar en linea.

Enlace:
Entanglement.

10 marzo 2012

Las pastillas mágicas

Artículo escrito por mi para Revista Somos

Las pastillas mágicas: El negocio de la enfermedad


Los logros de la medicina moderna y la química farmacéutica son innegables: Aumento de las expectativas de vida, erradicación de muchas enfermedades mortales, tratamientos para problemas antes incurables. Sin embargo, la cantidad de enfermos aumenta y aumenta. ¿Qué está ocurriendo para que se produzca esta contradicción?


Para caer en una estafa o un timo hay un requisito: Querer obtener algo de forma inmerecida o a un costo menor de lo que sabemos que realmente vale. Es el anzuelo, la manera como un estafador consigue lo que quiere.

¿Qué es lo que queremos obtener cuando consumimos un medicamento?

El negocio de la administración de los síntomas

Revuelo causaron en 2008 las palabras del premio Nobel de Medicina Richard J. Roberts al denunciar algo que todos sospechábamos: Para gran parte de la industria farmacéutica no es rentable producir medicamentos que curen realmente, porque como son empresas, cuyo último objetivo es aumentar sus ganancias y asegurar su rentabilidad futura, la gente sana no es negocio. Por lo tanto, la mayoría de las investigaciones se centra en producir fármacos que, en vez de curar, producen más bien un alivio temporal de los síntomas, lo que hace que el consumidor se mantenga “cautivo”.


De esta manera, vemos el mercado lleno de “remedios” que hay que consumir de por vida, que son planteados como un tratamiento, pero que en realidad son simples cuidados paliativos que nos mantienen como fieles consumidores de un producto farmacológico.
Así, cuando la salud, la fabricación y el acceso a los medicamentos deja de ser un derecho humano fundamental y se ponen a disposición de las leyes del libre mercado, rápidamente se pierde la ética que defiende la vida y se prioriza las estrategias de negocio para la maximización de las ganancias.

Me duele la inflamación del PIB

Un buen ejemplo para entender la enfermedad como mercancía es el caso de la pandemia de gripe porcina (H1N1) anunciada en 2009 y 2010, en la que cientos de gobiernos a lo ancho del mundo protegieron a sus ciudadanos con la compra de retrovirales.

Esta medida tenía como objetivo calmar el temor de la población, que, a su vez, había sido generado por la misma industria, y que en el fondo, no protegía de nada: Se había comprobado y mostrado públicamente que esos medicamentos no evitaban el contagio, ni ayudaban de manera significativa a la cura y ni siquiera reducían los síntomas de la enfermedad.

Sin embargo, ¿fue todo pérdida? No para todos. El negocio fue un éxito para los fabricantes.
Cuando la salud es un mercado, una pandemia (real o imaginaria) es un negocio exitoso. Visto desde esta óptica, cada nueva enfermedad ayuda a que mejoren las ventas, crezca nuestra economía y aumente el PIB. Todo un logro.


Oferta y demanda

Cuando en 1957 Albert Sabin inventó la vacuna oral contra la poliomielitis tomó una decisión asombrosa: No obtener beneficios de su invento. Gracias a él, esta enfermedad, que durante mucho tiempo provocó grandes epidemias, hoy se encuentra en vías de ser erradicada.

El caso de Sabin es una excepción. En la actualidad, el objetivo de los medicamentos es la obtención de ganancias sin barreras éticas, y es por ello que, tal como lo denuncia el mencionado Dr. Richard J. Roberts, las farmacéuticas no invierten en la investigación de las dolencias del Tercer Mundo.

El contagio de las enfermedades no responde a la lógica de la ley de la oferta y la demanda, ni respeta barreras económicas ni políticas; sin embargo, la elaboración de medicamentos sí. Por ello, en los países más pobres del mundo cada día mueren más de 8 mil adultos, ancianos y niños por enfermedades perfectamente curables.



Salvación patentada

Cuando hablamos de medicamentos, un elemento muy importante a considerar son las patentes comerciales. Estas permiten al “inventor” de un fármaco específico tener la exclusividad en la fabricación y la comercialización de un producto.

En principio, la patente comercial tiene como objetivo financiar la investigación y las pruebas clínicas que aseguren que el medicamento funciona. Sin embargo, esta misma exclusividad es la que permite que una empresa farmacéutica decida de manera unilateral el precio del medicamento y su forma de distribución, lo que provoca que en algunos casos la compañía decida simplemente no vender el medicamento en algún país cuya población tiene poco poder adquisitivo.

Dependiendo del país, la patente del medicamento dura entre 10 y 20 años. Pasado ese tiempo, existe la posibilidad de fabricar un fármaco “genérico”, que básicamente es el mismo elemento que el medicamento de marca, pero sin pagar los altos costos de las patentes.

Sin embargo, en la actualidad es muy común que, poco antes de que expire una patente, las empresas farmacéuticas le encuentren un “nuevo uso” a su producto, extendiendo así forzosamente su derecho de exclusividad.


Otra práctica común es la de inventar un medicamento ligeramente mejorado, acompañado de fuertes campañas de marketing para convencer de que el antiguo medicamento no es tan bueno como el nuevo. Un claro ejemplo en este caso es el de los antibióticos, en que es muy común que nos receten uno de “última generación” que puede costar fácilmente sobre 30 mil pesos, versus la clásica, efectiva y genérica penicilina.

Yo no vengo a vender, vengo a recetar…

¿Por qué un médico nos recomendaría un medicamento más costoso? Lamentablemente, han sido documentadas estrechas relaciones entre las empresas farmacéuticas y los médicos, tanto así que muchas farmacias escanean las recetas médicas y le envían la información a los laboratorios. De esta manera, las empresas premian a los médicos pagándoles viajes a conferencias organizadas por las mismas farmacéuticas en lugares de curioso interés turístico.

Es por esto que en Colombia -un ejemplo a seguir al respecto- se creó una ley que obliga a los médicos a recetar solamente fármacos genéricos, pudiendo recetar medicamentos patentados sólo si justifican cada caso con argumentos comprobables.


El paraíso de las farmacias

Hace algún tiempo, me visitó una amiga uruguaya que es química farmacéutica. Al pasear por nuestra capital, llamó por teléfono a su padre diciéndole: “¡Este es el paraíso de las farmacias!” Nadie que haya estado en Santiago requiere una explicación al respecto: Hay una farmacia en cada esquina.
Obviamente, esto no es casual. En un modelo de libre mercado el gran número de farmacias tiene solo una explicación: es rentable. Es decir, los santiaguinos estamos consumiendo muchos medicamentos.
Y así es, en Chile existe una drogodependencia extrema, lo que fue demostrado en la Encuesta de Salud 2009-2010 (ENS 2009-2010), en la que un 48,5% de los adultos reportó que consumía a lo menos un medicamento (permanentemente) y el promedio de la población ¡consume más de 2 medicamentos! La cifra aumenta sobre 4 fármacos en los adultos mayores de 65 años.

Las tendencias de los adultos se expresan también entre los más pequeños: alrededor de un 20% de los niños en etapa escolar se encuentra en algún tipo de tratamiento farmacológico, principalmente por déficit atencional con hiperactividad (ver recuadro).


Fármacos para los sanos

Hace más de 30 años, Henry Gadsden, director de la compañía farmacéutica Merck, poco antes de retirarse, declaró su sueño a la revista Fortune: Vender medicamentos a los sanos. Así sencillamente proclamaba la consigna que hoy mueve a la industria farmacéutica: Vender productos a todo el mundo, al igual que cualquier otra empresa.

Lamentablemente, su sueño se ha hecho realidad, y en la actualidad el consumo de medicamentos -y el caso de Chile antes mencionado es un gran ejemplo- es una acción cotidiana para muchas personas sanas.

¿Cómo se ha logrado esto? Básicamente, a través de dos estrategias: Primero, la farmacología preventiva: encontrar “factores de riesgo” y comenzar el tratamiento antes de que se transforme en una enfermedad. Así, cuando hay hipertensión arterial, de inmediato se habla de posibilidad de infarto y, por lo tanto, se medica a la persona, que solo tiene un factor de riesgo, sin hablar de los posibles efectos secundarios de estos medicamentos, que incluyen el daño hepático, problemas de sueño y disfunción eréctil en los varones, entre otros.

Para lograr el tratamiento de los sanos se redefine una enfermedad de manera que los porcentajes de prevalencia aumenten, se transforman los riesgos en enfermedades y se aumenta la preocupación sobre futuras enfermedades en la población sana.

En general, se habla de cifras, como: “reduce un 33% el riesgo de sufrir un infarto”; sin embargo, cuando el riesgo estadístico es de un 3% (o sea, que 3 de cada cien personas tienen un infarto), esa reducción solo significa en términos reales un 1% (el 33% de 3= 1). Es decir, el medicamento solo evitará un infarto entre cada 100 personas.

De manera que gastamos una considerable suma de dinero y generamos daños a veces irreversibles a nuestro organismo y a nuestra vida en general solo por reducir el 1% de probabilidades. Más bien, los tratamientos deberían estar orientados a mejorar nuestros hábitos alimenticios y de ejercicio físico.



Creación de enfermedades

La segunda estrategia es mucho más escandalosa: Una empresa farmacéutica contrata especialistas para encontrar una nueva enfermedad. ¿Quiénes son esos especialistas? ¿Médicos? ¡No! Agencias de marketing que simplemente estudian a la población en busca de características naturales pero molestas que sean comunes a una parte significativa de la población.

Así, se han inventado o aumentado la gravedad de enfermedades y desórdenes como la disfunción sexual femenina, el síndrome premenstrual, la rosácea, el déficit atencional con hiperactividad o -el caso más emblemático- el síndrome de ansiedad social.

Este último síndrome fue inventado por una empresa de marketing estadounidense que contrató a psiquiatras para que hicieran charlas al respecto, lo que fue acompañado de una gran campaña publicitaria que, a su vez, recomendaba un medicamento antidepresivo específico que rápidamente logró un gran éxito en el mercado.


Doctor: ¡Quíteme esto!

¿Cómo es posible que tantos caigamos en un engaño tan simple? La respuesta no es fácil, porque tiene que ver con nuestra concepción de la salud y nuestra forma de vida.

¿Es la salud la ausencia de todo malestar? Una de las claves para vender medicamentos a las personas sanas radica en la transformación de malestares naturales en enfermedades. De esta manera, situaciones habituales como la fatiga después de trabajar una larga jornada, la tristeza por la pérdida de un ser querido, los normales cambios de ánimo o dificultades para dormir porque algo nos aproblema, fácilmente son diagnosticados como enfermedades y tratados con medicamentos. ¿Logrando qué? Con suerte, una vida plana, sin altos ni bajos. Pero ni siquiera eso. Nos estamos drogando y ni siquiera lo estamos pasando bien.

Se ha comprobado que gran parte de los medicamentos no funciona, sobre todo aquellos dirigidos a las enfermedades mentales. Incluso en el caso de los antidepresivos por inhibición selectiva de la recaptación de serotonina, que son los más usados en el mundo entero, se ha demostrado su ineficacia (y que incluso pueden generar el efecto contrario, ver recuadro).


La consecuencia de nuestros actos

Muchas veces miramos nuestra salud como si fuera una bendición del cielo, de dios, del universo, del azar, del destino o de cual sea nuestra creencia. Sin embargo, en la naturaleza no hay premios ni castigos: Hay consecuencias. Nuestro estado de salud es un excelente indicador ¿de qué? De cómo estamos viviendo.

Las enfermedades son resultados o expresiones de lo que nos está pasando. Claramente tienen que ver con lo que estamos haciendo, con cómo nos estamos cuidando, cómo estamos comiendo, cómo nos ocupamos del equilibrio de nuestro cuerpo y nuestra mente.

Es muy común encontrar personas que viven en un ambiente contaminado (como Santiago), que no hacen ejercicio, que le exigen a su cuerpo largas jornadas laborales, sumadas a formas de recreación que implican más desgaste para el cuerpo, alimentados por productos con alta cantidad de pesticidas tóxicos (como los más disponibles en nuestro país), que viven en casas que emanan gases dañinos (como el concreto) y que cuando se enferman esperan una cura mágica.

Y la búsqueda del milagro no abarca sólo a los fármacos; somos muchos los que buscamos una curación espontánea en las medicinas alternativas o complementarias, un curador que con solo tocarnos nos saque todos los males, ya que estos no nos pertenecen.

Somos vulnerables de ser engañados, porque estamos tratando de conseguir salud a un costo menor del real. Las enfermedades son nuestras, son producto de lo que hacemos, por eso me gusta la idea de tomar la enfermedad como un camino, como una señal, como un síntoma.

Estas expresiones físicas o emocionales son parte de nosotros. No defiendo la idea de que haya que vivir con dolor; creo en el uso moderado de los medicamentos, pero sin olvidar que estamos tapando un síntoma, no actuando sobre el fondo, y que, por mucho que lo tapemos, la desarmonía que la enfermedad está expresando seguirá estando ahí.

La única forma de no ser engañados es haciéndonos cargo de la enfermedad, asumiendo que esa enfermedad es nuestra y que la única forma de curarnos es cambiando: No podemos curarnos de un mal haciendo lo mismo que lo creó.


Artículo escrito por mi para Revista Somos. Publicado en el número de Agosto de 2011 de la revista.







06 marzo 2012

Whatever Works (2009)



Título: Whatever Works (Si la cosa funciona...)
Director: Woody Allen
Año: 2009
Premios: Ninguno significativo
Más información >>>

Woody Allen ha dirigido casi 50 películas, por lo que no pasa un año sin que saque un nuevo film, por lo que en su historial podemos encontrar de todo.

El caso de Whatever Works es bastante interesante, porque es una obra bastante diferente a sus últimos éxitos pero donde saca a relucir lo mejor del humor característico de Woody Allen.

Hasta hace una década atrás era habitual que el director interpretara el mismo los papeles protagónicos de las películas que filmaba, sobretodo en aquellas que se podían caracterizar como "comedias".

En esta ocasión se ha creado un personaje híbrido, entre el clasico Woordy Allen (que no solo actuaba, sino que también interpretaba personas que en realidad eran una caricatura de si mismo) y el actor y guionista Larry David.

Para quienes no lo conocen, Larry David fue el guionista que estuvo detrás de la exitosa serie de televisión Seinfeld, que durante 9 temporadas hizo reír al público con su comedia, rompiendo con las tradicionales sitcom, ya que como ellos mismos se definían, era una serie que no hablaba de nada.

Dentro de la serie, uno de los personajes más interesantes era George Constanza, quien era especialmente neurótico, egocéntrico y trasgresor. Justamente la gran mayoría de las historias de este personajes están basadas en las propias experiencias de Larry David, quien una vez que terminó Seinfeld comenzó con su propia serie "Curb your enthusiasm" en que se interpretaba a si mismo.

En la película Whatever Works, el personaje principal, Boris, interpretado por Larry David es una mezcla entre el personaje de ficción de George Constanza (o el propio David en su serie) y el clásico personaje interpretado por Woody Allen, logrando una visión critica, desencantada e hilarante de la realidad que lo rodea.

Una film sencillo, pero que cumple con su objetivo de hacernos reír, y además nos plantea una forma de vida bastante práctica.

La recomiendo.


04 marzo 2012

Panorámicas



Desde hace tiempo que no tomaba fotos panorámicas, y gratamente me he encontrado con una aplicación que hace que el proceso simplemente se haga presionando dos botones.

Solo debes tomar las fotos con tu cámara, tratando de mantener un pequeño trozo repetido en cada imagen y luego la cargas con la aplicación Hugin, que automáticamente crea la imagen panorámica.

Lo que hay que tratar es de que las diferentes imágenes mantengan la misma luz, de lo contrario la panorámica quedará dispareja.

Hugin es una aplicación gratuita, de software libre, multiplataforma y en varios idiomas. Se encuentra disponible para Windows, Mac y Linux.

Para Windows y Mac se puede descargar aquí:
Hugin

Para linux lo pueden encontrar en los repositorios por defecto de la mayoría de las distribuciones, por lo que basta con escribir el comando: apt-get intall hugin

Enlace: Hugin


02 marzo 2012

Escuchar


Hablar y escuchar

de “La oración de la rana”, de Anthony de Mello

Un anciano solía permanecer inmóvil durante horas en la iglesia. Un día, un sacerdote le preguntó de qué le hablaba Dios.
— Dios no habla. Sólo escucha — fue la respuesta.
— Bien… ¿y de qué le habla usted a Dios?
— Yo tampoco hablo. Sólo escucho.


Tomado de: Cuentos con luz propia